29 de febrero de 2008

La Vida y el Ajedrez




Si comparamos la vida cotidiana con el ajedrez, llegaríamos a la conclusión de que ambos son bastante parecidos y que hay muchas similitudes, pero hay una diferencia, y es que en el ajedrez, las piezas no pueden moverse a su antojo, si no con unos movimientos predeterminados. En la vida cotidiana somos nosotros las piezas que se mueven y quienes eligen para donde tirar. Pero todos a lo largo de nuestra vida, en diferentes etapas nos podemos comparar con las distintas piezas de un ajedrez.

Nacimiento: Es el inicio de partida y siempre lo inician los Peones.

Bebés: De niños somos como los Peones, podemos dar pasitos cortos, siempre hacia delante, pero estamos indefensos ante las demás piezas, y en ocasiones, nuestra felicidad es sacrificada por la felicidad de las piezas mayores.

Infancia: Después somos como los Alfiles, tenemos más libertad de recorrido, pero vamos siempre cruzados a todas partes, y seguimos siendo un incordio para las piezas mayores que no saben que hacer con nosotros, si sacrificarnos, o conservarnos para sacrificarnos en posteriores batallas.

Adolescencia: Pasamos a ser Torres, cuando además de tener libertad de recorrido, tenemos también la suficiente fortaleza y presencia como para que las piezas mayores no nos sacrifiquen, si no que nos tomen en serio y nos quieran tener siempre a su lado.

Matrimonio o vida de pareja: Nos convertimos en Caballos, alguien lleva nuestras riendas cortándonos la libertad de recorrido y nos usan de sementales o para tirar del carro.

Madurez: Nos convertimos en Reina, gozamos de toda libertad de movimientos y recorrido, y disfrutamos de nuestros Peones y Alfiles para tener felicidad...., y también de nuestro Caballo, a quien montamos cuando cuadra el tema.

Vejez: Llegamos por fin a ser Rey, momento en el que todas las piezas, están pendientes de nosotros y nos protegen de cualquier jaque al Rey, incluida la Reina, que es capaz de sacrificarse por nuestra supervivencia. Sólo damos pasitos cortos.

Muerte: Es el Jaque Mate, de él no nos salva ni un enroque, y ante el que nos encontramos solos, sin nadie que se sacrifique por nosotros, y supone el final de la partida.

La gran diferencia entre la vida y el ajedrez, es que, en la vida, a veces el Jaque Mate nos puede llegar incluso siendo un Peon, sin esperar a que seamos Rey.

Bienaventurados...

Bienaventurados los que no trabajan en Sábado, porque ellos sabrán lo que es un fin de semana de dos dias.

Bienaventurados los que están en el paro, porque ellos viven en continua festividad.

Bienaventurados los que duermen diez horas diarias, porque ellos nunca bostezarán en público.

Bienaventurados los que se van de compras, porque ellos tienen dinero para gastar.

Bienaventurados los que viajan, porque ellos tienen aún más dinero para gastar.

Bienaventurados los que hacen deporte, porque ellos tendrán sed. Bueno, y seguramente hambre y cansancio...

Bienaventurados los que no trabaj........, ah no, que esa ya la he puesto la primera...

Bienaventurados los que no trabajan en Domingo, porque ellos pueden ir al fútbol.

Bienaventurados los que beben, porque ellos no tendrán sed....o estarán tan borrachos que no se darán cuenta.

Bienaventurados los que van al fútbol, porque ellos no trabajan los domingos.

Bienaventurados los que tienen imaginación, porque ellos no necesitan televisión.

Bienavenurados los que no tienen televisión, porque ellos tendrán familia numerosa.

Bienaventurados los que tienen familia numerosa, porque ellos tendrán descuentos en los parques de atracciones.

Bienaventurados todos, porque así no me dejo a nadie sin nombrar.

24 de febrero de 2008

No tiene precio.....




- Ver amanecer sin la preocupación de tener que ir a currar
- Echarte a dormir sin la preocupación de tener que madrugar.
- Comerte un chuletón sin la preocupación de que te vaya a sentar mal
- Cagar a gusto mientras lees el marca
- Darle una patada en el culo al jefe, sin que sea en sueños
- Correr en pelotas por la playa de noche, de día sí tendría precio.......
- Dar un abrazo a un amigo/a....ó que te lo de él/ella
- Una lata de sardinas, a la cual no le puso precio la dependienta
- Quitarle el martillo al capullo del albañil que tengo al lado
- Una aspirina en estos momentos
- Ver reírse a mis hijos
- Que hacienda te devuelva dinero.........y no te lo vuelva a pedir
- Apagar el ordenador de la ofis y decir: hasta el lunes capullo
- Salir a la calle y no pisar mierda
- Que no se te acabe la batería del móvil
- Que haga buen tiempo en vacaciones...........y no cuando estás currando
- Tirarte unos cuantos pedos en la cama y después airearlos
- Quedarte un rato en la cama después de que suene el despertador
- Colarle una televisión de plasma al seguro por culpa de una bajada de tensión


Para todo lo demás, ya puedes currar para poder pagarlo........

Naturaleza "Protegida"

Yo entiendo por Naturaleza, hoy en día, todo aquel espacio, que aún no ha sido poblado por el hombre. Naturaleza protegida, lo podemos definir, como aquel espacio que ha sido “protegido” por el hombre. Y es que el hombre, se toma muchas licencias, a la hora de “proteger” la Naturaleza.

No voy a negar, que la acción del hombre, protegiendo animales y plantas en peligro de extinción, haya salvado a muchas especies, y seguramente, salvará a otras muchas... Pero lo cierto es que, durante millones de años, el ecosistema formado por el mundo animal y el mundo vegetal, ha estado evolucionando continuamente, sin que el hombre, que también formaba parte de él, como especie animal que es, influyera demasiado en su evolución. A través del tiempo, se forma una selección natural de las especies, que la naturaleza misma, cree que deben de sobrevivir.

Hasta qué punto, puede o debe el hombre, alterar dicho ecosistema, decidiendo qué especies debe de proteger para que subsistan, si la propia naturaleza ha decidido ya, que no deben sobrevivir... Proteger a una determinada especie, puede poner en peligro a otra especie, que a su vez, al extinguirse, puede dejar en peligro a otras especies, actuando así, como una reacción en cadena que altere irremediablemente el devenir de muchas otras especies, que sí que tenían el beneplácito de la naturaleza, para seguir con su evolución...

Por supuesto que, prefiero a alguien que se preocupa por la naturaleza, que a alguien que derriba montes, destruyendo así el hogar de muchos animales. Prefiero a un ecologista empedernido, que a un cazador aficionado... Pero mi conclusión es, que prefiero ser neutral, y limitarme a observar y convivir con la naturaleza, sin intentar protegerla, y por supuesto, sin destruirla, dejando que ésta siga el cauce normal que marque su evolución, sin intentar influenciar, ni para bien, ni para mal, en dicha evolución...

Deberíamos ser conscientes, de que, por nuestro modo de vida, ya no formamos parte de ése mundo animal que intentamos “proteger”, y me refiero al hombre civilizado, porque las tribus de aborígenes, sí que respetan ese mundo, y conviven con él, formando parte de dicho ecosistema, obteniendo de él lo que necesitan para subsistir, y sólo lo que necesitan, influyendo en él de una manera natural.

La naturaleza es mayor de edad, y sabe subsistir y evolucionar perfectamente sin la "ayuda" del hombre.


Especies Peatonales




Vas paseando por la calle y qué ves?

Gente andando con las manos en los bolsillos, algunos hablan por el móvil y se chocan contigo porque no ven más allá de la pantalla (malditos móviles), otros van por ahí con cara de nada con los auriculares puestos con alguien a su lado que intenta decirle algo, pero como no oye por culpa de la música, lo único que consigue es que tú tengas que ir a una farmacia a comprar un sonotone.

Otros van tan absortos en sus pensamientos, que se saltan el semáforo que está en rojo provocando el frenazo en seco de un tío que va en coche, eso si el que va conduciendo no va también pensando en el precio del mango tropical en época de rebajas y se lo lleva por delante.

O también está el que va leyendo el periódico mientras anda, y ése si que se lleva a un montón de gente por delante, y encima se enfada con quien no ha podido esquivarle porque le ha arrugado el periódico, y yo pienso, cuando llega a casa o al trabajo....qué coño lee, la sección de contactos? La necrológica?

Y si está lloviendo, ya ni te cuento, que tienes que ir esquivando los paraguas, que además van pegados a la pared como si no tuvieran paraguas, que es otra de las cosas que nunca entenderé, porqué si llevan paraguas para no mojarse, van todos pegaditos a la pared en fila india y tú que no llevas paraguas te tienes que salir para que no te dejen tuerto.

Otros van atropellando a todo el mundo con su cochecito de bebé, la mayoría de ellos sin carnét para conducir dicho tipo de vehículos sin tracción propia, y diciendo perdón, perdón a todo el mundo, como si no tuviera frenos ni volante para dirigir el cochecito!!!!!!

Mención especial merecen, porque siempre te encuentras alguno, los japoneses con su cámara colgada al cuello y su media sonrisa eterna, que asienten con la cabeza como si tú fueras el mismísimo Papa y que parece que todo les hace gracia y que todo merece ser inmortalizado mediante fotografía a la carrera, que no sé si alguna foto les saldrá bien, porque casi nunca se paran para hacer la fotografía de marras.

Y termino con los que simplemente pasean, porque todos los demás van a la carrera como si les persiguieran, porque los que simplemente pasean son especialistas en montar atascos en las aceras estrechas, importándoles un pepino, si los que van detrás o en sentido contrario tienen prisa, ellos son felices parándose a mirar escaparates con toda la curiosidad del mundo, como si de verdad fueran a comprar algo de ése escaparate algún día y a los que te dan ganas de darle un pescozón a ver si así se enteran que están entorpeciendo el fluido de tráfico peatonal.

Si es que es curioso ver la cantidad de especies peatonales que pululan por nuestras vecinales calles a diario, sin que les prestemos la más mínima atención.

Bueno, quizás en algunos casos...si que prestemos atención......