24 de enero de 2008

Ser o no Estar...

Seamos consecuentes con nuestro ser, teniendo en cuenta que estamos para ser, porque ser lo que vemos, y no ver lo que somos, nos deja en mal lugar...

Y pregunto: ¿Porqué ser si no se está? ¿Porqué estar si no se es? Podemos seguir siendo como somos, o estar donde estamos, pero ¿cuántos de nosotros somos como estamos?

Buena pregunta eh? Yo he intentado responderla y mirar cómo me he quedado..., con la boca abierta, y mis pocas neuronas activas escondiéndose para no hacer el ridículo ante semejante cuestión trascendental.

Yo he llegado a la conclusión, eso sí, ya digo que sin pensar demasiado, de que, si estamos donde tenemos que estar, y somos como tenemos que ser, viviríamos en un mundo perfecto, useasé una utopía en toda regla, porque casi nadie, por no decir nadie, está siempre donde tiene que estar, ni es siempre como tiene que ser.

¿Las razones? Son múltiples, cada cual más variopinta que la anterior. Que si me duele la cabeza, que si hoy no es mi dia que lo tengo cruzao, que si ha subido el precio de las alcachofas y no me alcanza para comprarlas, que si he lavado los pantalones y aún no me han secado, o que si el perro del vecino se ha tirado a mi perra y a ver que hago yo ahora con una camada de caninos infantiles corriendo por casa sin control, je!! Sin control, qué paradoja, que hubieran usado control no? Ahora tendré que leerme un libro de nombres de perros para ver cómo les llamo a todos...¿y si hay dos que se parezcan mucho? ¿cómo los distinguiré? Pues nada le cortaré la cola a uno de ellos, quiero decir el rabo..., bueno, lo que tienen encima del culo, para que todo el mundo lo entienda, que no soy ningún capador compulsivo. Aunque bien pensado, si los capo a todos no me darán el disgusto de tirarse a ninguna perra de esas busconas callejeras, que buscan que las preñen para que algún perrito millonario las mantenga de por vida... ¿Y si en la camada vienen varias hembras? El sinvivir será peor, porque eso me podría traer varias camadas de nietos....Dios, ya me veo como el dueño de los 101 Dálmatas pero sin jardín!!!!!! Menos mal que hablé de perros y no de conejos!!!

Todo eso me pasa por ser lo que no soy, useasé pensador, que lo sean los que tienen que serlo, que yo seré lo que tengo que ser, que tampoco es ser cuidador de perros desvalidos, al menos no en ese volumen, como mucho un par de ellos para que me saquen a pasear de vez en cuando, eso si, por Dios!!! Que sean del mismo sexo para que no se reproduzcan...

La Especie Humana


La especie Humana es una especie llena de especialidades espaciadas en un espacio especial, y especialmente espacioso, aunque va a terminar siendo una especie espa...churrada.

Vaya, después de escribir esto, voy a tener que ir a espaciarme a un espá de esos que están en un espacio natural y sereno, porque el espacio tan poco espacioso en el que me encuentro me va a producir algún espas...mo.

Ya me he perdido.... Bueno, a lo que iba, que si miramos todas las especies que pueblan nuestro amado planeta tierra, no encontraremos una especie con miembros tan dispares como la humana. Nosotros, bueno, los científicos, estudian a todas las especies para averiguar cosas sobre el comportamiento de cada una de ellas, y más o menos, todos los miembros de cada especie, tienen un comportamiento similar. Es decir, todos los monos se comportan más o menos igual, todos los leones comen lo mismo, todas las hormigas siguen el mismo camino...., y así podríamos seguir con cualquier especie.

Pero la humana..., no, los miembros de esa especie no siguen ninguna pauta única. Ni todos comen lo mismo, ni a todos les gusta hacer lo mismo, y ni que decir tiene que su comportamiento es de lo más variopinto según el miembro que estudiemos.

Por ejemplo: Cualquier miembro de otra especie, afronta el rito del apareamiento de una manera singular y característica de su especie, y siempre siguen el mismo rito, sea cual sea su objetivo. Ahora bien, si intentáramos estudiar el rito de apareamiento de la especie humana, llenaríamos tantas libretas de apuntes, que necesitaríamos una biblioteca para almacenarlo todo. Y además, tales notas serían tan contradictorias como escuchar el parte meteorológico en diferentes cadenas de televisión.

Y qué os parece el hábito alimentario de la especie humana? Acaso sigue alguna pauta? Si en ocasiones, ni siquiera dos miembros de la misma familia consumen el mismo menú. Los hay que reniegan de la carne como del pagar facturas. Yo no me imagino a un León vegetariano, ni a un ciervo corriendo detrás de un cachorrillo de León para darse un banquete cárnico. Claro que puestos a pensar, los Leones tampoco han necesitado nunca que les receten comer verduras por culpa del colesterol...

Claro que dicen los científicos, que todas estas diferencias entre la especie humana y el resto de especies, viene dada por la capacidad que tienen los humanos para razonar...Y ahí es donde me pierdo de verdad.
Porque....
De verdad tiene capacidad de razonar alguien que la emprende a golpes con un familiar a quien supuestamente quiere?
De verdad tiene capacidad de razonar alguien que entra en un colegio y la emprende a tiros con todo quisqui?
De verdad tiene capacidad de razonar alguien que deja aparcado un coche lleno de explosivos en mitad de la calle?
De verdad tiene capacidad de razonar alguien que, pudiendo ayudar a personas que no tienen ni para comer, gasta una quinta parte del presupuesto de un pais en armas para defenderse de.....de qué coño quiere defenderse?????? De los ataques de alguien a quien previamente él ha atacado???? Coño pues que no ataque él primero no???

Los científicos justifican estos comportamientos, en la mayoría de los casos, llamándolos desequilibrados mentales...., pero la verdad, es que, yo nunca he visto a ningún desequilibrado haciendo el bien a los demás, ni repartiendo abrazos, ni repartiendo dinero....

Será que no existen los desequilibrados buenos, si no buenos desequilibrados.

9 de enero de 2008

Teoría de la relatividad

No, no me voy a volver loco intentando explicar algo que está lejos de mi alcance, y que ya explicó en su momento, de una manera más o menos comprensible para el ciudadano de a pié, un tal Albert Einstein.
Mi reflexión, gira en torno al uso que le damos a la relatividad, como justificación a los diferentes y variados deslices, que cometemos cotidianamente. O tras la que nos escudamos, para quedar absueltos, ante cualquier tipo de actitud sospechosa que se nos impute. Pero nunca, y digo nunca, la usamos como acicate para intentar mejorar nuestro comportamiento ó actitud.
Como todo es relativo, podemos justificar cualquier situación anómala en la que nos veamos envueltos y aquí van algunos ejemplos:

- Conducía muy rápido............................ Otros corren más.
- Hablas poco......................................... Otros hablan menos.
- Dices muchos tacos.............................. Otros dicen más.
- La tienes pequeña................................ Otros la tienen más pequeña.
- Tienes poco pelo.................................. Otros tienen menos.
- Bebes mucho....................................... Otros beben más.
- Eres feo............................................... Otros son más feos.
- Despilfarras.......................................... Otros despilfarran más.
- Tardaste mucho.................................... Otros más.
- Trabajas poco....................................... Otros trabajan menos.


Como podéis ver, siempre hacemos referencia a lo relativo de las situaciones, a nuestro favor, nunca la usamos como autocrítica, pensando “otros corren menos”, ó “otros beben menos”, ni “otros trabajan más”. Como todo es relativo, a ver quién es el guapo, que se atreve a echarnos en cara, éste o aquel comportamiento, sin que podamos recurrir a la relatividad.
Relativizamos relativamente y con relativa frecuencia, todo lo que es relativamente relativizable, e incluso lo que es relativamente irrelativizable, pero sinceramente, creo que relativizar por relativizar es relativo y además es tontería...
De hecho, éste blog es relativamente absurdo, pero como todo es relativo, a ver quién me dice a mí, que no hay otros blogs relativamente más absurdos........., o relativamente menos absurdos...

En fin, no sigo, porque me estoy volviendo relativamente loco....

Maldita primera hora rutinaria

Hoy, como todos los días laborales, suena mi despertador, o sea mi móvil, con cierta melodía preestablecida para tal menester. Son las 7.30, y como todos los días hago caso omiso, a sabiendas de que volverá a sonar nueve minutos más tarde. No creo que pasen ni 30 segundos hasta que me vuelvo a quedar dormido.

Nueve minutos después, segundo aviso acogido por mi somnolienta cabecita con un “jrhtv bpqiuthvm htqh” que despierta a mi señora, la cual y sin previo aviso, me suelta una patada, que gracias a que estoy de espaldas a ella, impacta en mi trasero en vez de impactar en otro sitio más delicado. A pesar de todo, vuelvo a hacer caso omiso, decidiendo esperar al tercer aviso y sigo remoloneando entre las sábanas.

Cuando suena el tercer aviso, es decir a las 7:48, ya no me queda más remedio que levantarme, esperar a un cuarto aviso sería tensar demasiado la cuerda, y tras incorporarme aún con los ojos cerrados, me dirijo al excusable a hacer lo que todos hacemos nada más levantarnos, dicho finamente miccionar copiosamente, pero dado las horas que son y dado que uno todas las mañanas aún se levanta de aquella manera, pues como que me cuesta horrores apuntar en el “agujerito”, si, ya sé que es un agujero grande, pero en esas situaciones se vuelve muy pequeñito, y las posturas que uno tiene que adoptar para que aquello no vaya a donde le dé la gana, me hacen pensar si no podría ganarme la vida como contorsionista profesional.

Tras limpiar las salpicaduras inevitables producidas por el chorro incontrolado a presión mientras esbozo mi segundo “uierhtb`q ytvq8mv utvt9ncm” del dia, me dirijo a la cocina con el ánimo de romper con mi ayuno. Con la típica torpeza por el tembleque producido por el destemple matutino, empiezo a prepararme un par de tostadas. Una vez introducidas en el tostador y sin dejar de temblar pongo a calentar el café. Me quedo embobado mirando como se calienta el líquido elemento, como si nunca lo hubiera visto, mientras recuerdo lo bien que estaba en la cama hace unos minutos. Hasta que se despierta mi sentido del olfato, para apreciar un ligero olor a quemado. Giro la cabeza y también se despierta mi sentido de la vista para observar que sale humo del tostador. Acudo raudo hacia allá, para despertar mi sentido del tacto al sentir que me quemo los dedos, cuando cojo las dos carbonizadas tostadas que pretendía que fueran mi desayuno.

Decido tirarlas a la basura y las sustituyo por un paquete de galletas de chiquilin, mientras esbozo mi tercer “utvhbp qeuhn nercjm vbqyne” del dia, y pienso “éstas no se queman”. Con tanto follón no me he dado cuenta de que el café que estaba calentando, ha hervido. Afortunadamente no se ha salido del cazo porque era muy poca cantidad, así que después de enfriarlo un poco con leche fría, lo hecho en la taza y la dejo en la mesa, mientras escupo mi cuarto “iertuhbp qtvhmcquft8by”. Me dispongo a sentarme con mi característica torpeza matutina, con la mala suerte de que golpeo en la pata de la mesa, haciendo que se tambalee la taza y que la mitad del café caiga en la mesa. Todo ello sumado al dolor que sentía en la rodilla por el golpe, produce que lance mi quinto “urdhbpñ riugbnvuj erihtvgu” a pesar de haber respirado hondo un par de veces.

Tras ingerir una cantidad indecente de galletas, y con complejo de “Triqui” (el monstruo de las galletas de Barrio Sésamo), me desnudo y temblando como un gilipollas me meto a la ducha. Como casi todos los días, se me mete jabón en los ojos, y con los mismos cerrados intento alcanzar la toalla para limpiarlos un poco, con la mala fortuna, de que lo que agarro es la cortinilla, tirándo fuertemente de ella hacia mi.... os podéis imaginar el desenlace, sigo con escozor en los ojos, y además, los dedos del pie magullados por el impacto de la barra que sujeta la cortinilla, y esta vez grito mi sexto “irjhvoñ irtujbq vnwegc” de la mañana....

Como puedo me seco, pero apenas puedo peinar mi poco pelo, ya que no puedo abrir aún los ojos por culpa de lo que me ha escocido el jabón, ya son las 8:15, asi que me visto a toda prisa y cuando me voy a calzar, me doy cuenta de que me he puesto dos calcetines diferentes, y si, mientras vomito mi séptimo “jerh vuirh cnrig” del día, busco alguno de los compañeros de los dos calcetines y me pongo el par que primero ha aparecido su pareja.

Cuando estoy a punto de subirme al coche, me doy cuenta de que no he cogido la cartera, guardada aún en la chaqueta que usé el dia anterior, así que vuelvo a subir a por ella. Afortunadamente vivo en casa, así que no tardo mucho en volver a estar sentado en el coche. Pero cuando voy a arrancar, me doy cuenta de que se me han olvidado las llaves de la oficina. Vuelvo a subir los quince peldaños que tengo hasta la planta alta de mi casa y cojo las malditas llaves, mientras pienso que menos mal que me he dado cuenta. Por fin saco el coche del garage, y cuando estoy cerrando la puerta plegable del mismo, pienso: he cogido el móvil? Bueno, supongo que ya sabéis la respuesta, así que mientras vuelvo a subir las escaleras, mascullo el octavo “kjhton vhgicrco iern ,cj vi njc,vmc kcjgmic”, ésta vez acompañado por el primer “UIER bhvñ irjvg n iegvijc” de mi señora, acompañado de un “ a ver si despiertas ya” con tono malhumorado......, mientras pienso “esa cara de mala hostia es la misma que hace 5 minutos me ha dado un beso de despedida?

Cuando definitivamente subo al coche, son las 8:30, mientras pienso:

“MALDITA PRIMERA HORA DEL DIA RUTINARIA”